Ordenan prisión domiciliaria para el juez Bailaque, pero sus fueros lo protegen
La medida, de la Cámara de Apelaciones, no podrá hacerse efectiva de inmediato debido a que Bailaque aún ejerce como magistrado y goza de inmunidad judicial. Depende del Consejo de la Magistratura.
19/05/2025 | 17:46Redacción Cadena 3 Rosario
La Cámara Federal de Apelaciones de Rosario dispuso el arresto domiciliario por 90 días para el juez federal Marcelo Bailaque, en el marco de una causa en la que está imputado por extorsión, prevaricato e incumplimiento de sus deberes como funcionario público.
Sin embargo, la medida no podrá hacerse efectiva de inmediato debido a que Bailaque aún ejerce como magistrado y goza de inmunidad judicial.
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Esta resolución representa un fuerte llamado de atención al Consejo de la Magistratura, órgano responsable de evaluar la conducta de los jueces y que ahora queda bajo presión para tomar medidas frente a esta situación.
La decisión de la Cámara —integrada por los jueces Aníbal Pineda, Fernando Barbará y Elida Vidal— rechazó el recurso presentado por la defensa de Bailaque, que había apelado el pedido de prisión preventiva.
En su lugar, los camaristas consideraron adecuada una medida cautelar menos gravosa: arresto domiciliario por tres meses. En su argumentación, Barbará destacó que la posibilidad de una pena mínima de cinco años de prisión fue un elemento clave para sostener esta medida.
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Por su parte, la jueza Vidal dispuso un embargo de 600 millones de pesos sobre los bienes del magistrado, cifra inferior a los 1.400 millones originalmente planteados.
En paralelo, esta semana la Justicia Federal también deberá resolver la situación del empresario Fernando Whpei, quien quedó detenido la semana pasada en la misma causa que involucra a Bailaque.
La defensa de Whpei solicitó que se le otorgue arresto domiciliario por razones familiares, aunque aún no se ha resuelto su pedido.
El caso sumó un nuevo capítulo de gravedad e irregularidad la semana pasada. Luego de que el juez Eduardo Rodrígues Da Cruz ordenara la prisión preventiva de Whpei, un cabo de la policía se acercó al magistrado y le ofreció un sobre.
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Según el propio relato del agente, el dinero había sido dejado por el abogado del empresario "como un gesto" por quedarse hasta tarde durante la audiencia. El juez rechazó tajantemente la situación, le manifestó al policía que el hecho era completamente inapropiado y que “no tenía que dejarme adentro ni afuera de nada, porque no comparto en absoluto lo que pasó”.
Finalmente, solicitó la inmediata detención del cabo sin abrir el sobre ni aceptar el supuesto “obsequio”.
En este contexto, la resolución del caso de Whpei genera interrogantes. Resulta llamativo que mientras a Bailaque, un funcionario judicial, se le haya concedido el arresto domiciliario, al empresario involucrado en la misma causa se le mantenga la prisión efectiva. Un contraste que arroja más sombras sobre una causa ya plagada de controversias.